Tenía una canción pero no sabía como cantarla. Tendría que aprender a cantar. Aprendí a cantar. Después de que hube aprendido a cantar, quise cantar la canción que tenía de antes, pero descubrí que la había olvidado; así que, haber aprendido no me sirvió. Entonces me impuse la tarea de olvidar lo aprendido, no para que volviera la canción, porque de alguna manera supe que la canción realmente nunca estuvo allí.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario