Muchas veces oí voces lacerantes prorrumpir
pronunciando la palabra esperanza
Yo la vi morir, yo no la maté. Todo era oscuro después

Polvo a modo de lágrimas mis soliloquios fallidos
que los otros, ellos, no oyen. Yo les temo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya... un escrito muy interesante, realmente. Tienes una fuerza indiscutida en tus palabras y en verdad impulsa a seguir leyéndote.

Un saludo desde Santiago de Chile,

Andro.*.

Oscar Alvarenga dijo...

Andrómeda: Agradezco tus elogios, son un gran honor para mi.

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  • - but it's hard to stay mad, when there's so much beauty in the world. Sometimes I feel like I'm seeing it all at once, and it's too much, my heart fills ...
    Hace 10 años